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El seleccionado nacional que milita en el Everton de Viña del Mar en Chile, Denil Maldonado, habló con la prensa de la Fenafuth luego de haberse unido a los trabajos de la sub-23 en lo que representa su quinto microciclo.
"Estoy agradecido con Dios por estar acá, es un bendición poder representar a Honduras de la mejor manera y son experiencias que uno pasa (medalla de plata en Lima 2019)", dijo.
El defensa está feliz de afrontar un nuevo reto en esta categoría que consiste únicamente en obtener un boleto a los Juegos Olímpicos de la ciudad de Tokio que se celebrarán este año.
"Son etapas que uno pasa, gracias a Dios he venido en todos los procesos de selecciones y me ha dado este plus de estar con la selección mayor que creo que a mi corta edad es una gran bendición para mi vida y la de mi familia", admitió.
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Maldonado reitera que lo que más importa es dar lo máximo, trabajar día a día y prepararse para cualquier reto que se presente. El joven central además comentó que hoy en día tienen compañeros con los que han trabajado anteriormente.
"Uno no desconoce cuando se junta con los compañeros y sabe cada quien, así rápidamente nos adaptamos a la selección", expuso.
Maldonado, de 22 años, tiene experiencia en el extranjero en el Pachuca de la Liga Mx y en el Everton de Chile y además es el capitán de la sub-23 desde 2019 por lo que se espera que guíe a la selección en el torneo de Guadalajara, México.
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