Los jugadores del París Saint-Germain y del Estambul Basaksehir enviaron el miércoles un mensaje contra el racismo antes del duelo de la Liga de Campeones, suspendido la víspera a causa del presunto insulto racista proferido por el cuarto árbitro contra un miembro del cuerpo técnico del equipo turco.
Los 22 futbolistas llegarán al Parque de los Príncipes sin ningún mensaje, pero una vez en los vestuarios se colocaron una camiseta contra el racismo y el escudo de ambos equipos, al igual que el nuevo cuerpo arbitral.
Se trata de colegiados holandeses dirigidos por Danny Makkelie, que sustituyeron al cuarteto rumano que provocó el incidente.
Con esas camisetas realizaron el calentamiento y, posteriormente, también ingresaron en el estadio, respetando las consignas de ditanciamiento y seguridad para evitar el contagio de coronavirus.
Los jugadores se juntaron en el centro del campo acompañados de los árbitros y todavía con esas camisetas.
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