Héctor Castellanos, fiel a su filosofía, dio la cara luego de salir expulsado en el juego Diriangén contra Motagua donde dejó a su equipo en desventaja, situación que provocó una dificultad en el Ciclón que terminó cayendo 2-1 en Nicaragua.
El volante Azul considera que fue exagerada la determinación del árbitro de mostrarle la segunda amarilla por una jugada que piensa fue normal.
"Tenemos que aceptar el error, sabemos cómo se juegan estos partidos, habíamos hablado que no podíamos quedarnos en desventaja. No comparto la decisión del árbitro, no me quiero meter en eso. Siento que no iba con los botines de frente", comentó.
Castellanos opina que el arbitraje fue localista en varios lapsos del partidos, pero admite que sí se equivocó al ir fuerte en la jugada de su expulsión.
"Por ahí en el primer tiempo tuvo decisiones con las que no estábamos de acuerdo, no es excusa, Motagua no pone excusas y como jugador admito mi error, nos queda para aprender e intentar que no nos pase en otros partidos, aunque en otros juegos esa jugada no representaba una amarilla", aseguró.
La Perrita sabe que ahora Motagua se juega la vida en cada partido de la Copa Centroamericana tras esta derrota en Diriamba.
"La presión en el primer tiempo nos costó hacerla, en el segundo tiempo arrancamos bien y todo mejoró. ¿Obligados a ganar? Seguro, en Motagua somos conscientes que debemos ganar los dos juegos en casa y cerrar bien en Costa Rica", finalizó.