Iván Anderson ha salido a avivar la polémica del clásico sampedrano luego de denunciar que recibió una entrada peligrosa por parte de un futbolista de Real España que pudo haberle lesionado, pero este no vio la tarjeta roja.
Esa jugada tuvo lugar en el duelo que protagonizó Marathón ante la Máquina, el cual ganó el elenco de Jeaustin Campos 1-0 en el estadio Morazán.
Al minuto 82 del partido Iván Anderson se escapó al área de Real España y Jack Baptiste se lo bajó con una dura falta, el árbitro Luis Mejía consideró que con una amarilla bastaba y no le expulsó.
Esta acción fue la gota que derramó el vaso para Pablo Lavallén quien se lanzó a reclamarle con todo al juez del encuentro. La situación se calentó y el argentino terminó siendo excluido del juego por una doble amonestación por reclamar.
Iván Anderson usó su cuenta de Instagram para denunciar que la entrada de Baptiste pudo haberlo lesionado y que el arbitraje del clásico no fue bueno. Además, el seleccionado panameño piensa que esto no debe repetirse ya que la próxima ocasión podría haber consecuencias irreparables.
"Es lamentable que esto sea amarilla, yendo con intención de afectar, no es la primera vez que pasa. Toca verificar porque si hubiera sido algo peor, el afectado siempre será el jugador", escribió en Instagram.
El clásico fue un episodio polémico ya que Lavallén denunció que el gol de la Máquina es procedente de un fuera de juego de Nixon Cruz.
"Fue un partido como lo habíamos previsto, muy difícil en un clásico donde no se regala nada y se abre con una jugada compleja, recién miré la jugada y hay offside, por lo que me dicen los futbolistas el línea le avisa al árbitro, pero él toma la decisión", dijo en conferencia.