El delantero César Guillén, quien milita en Lobos de la UPNFM, es una historia de superación, puesto que pasó de ser olvidado en el Vida a ser convocado a la Selección de Honduras.
Esta oportunidad le llega a los 24 años, siendo elegible para la escuadra Mayor o la Sub 23 que irá a los Juegos Olímpicos.
Guillén debutó el 10 de agosto de 2016 con el Vida en un partido contra Juticalpa a los 19 años.
En su primera campaña jugó 16 partidos y anotó cinco goles, se pensaba que iba a ser brillar en La Ceiba, pero no se dio.
Después, en 2020, terminó siendo suplente con Ramón Maradiaga en el banquillo y el club le dio de baja.
Posteriormente, Lobos lo fichó, con la UPNFM disputó 16 partidos y anotó tres goles, uno de ellos contra Olimpia de gran manufactura.
Tras su nivel con el equipo de Salomón Nazar, Fabián Coito le consideró para el microciclo especial del 14 al 19 de junio.
Guillén confesó cómo vivió ese momento al ser tomado en cuenta por Honduras, además reveló que estaba con su familia al recibir la noticia, emocionándose inevitablemente.
"Nunca había tenido la oportunidad de ser seleccionado nacional, es un sueño que se me está cumpliendo. Estaba con mi familia cuando recibí el mensaje y saltamos todos de la emoción”, declaró a Deportes Al Desnudo Diario.
El oriundo de Santa Fé Colón, aseguró cuál es su objetivo en esta convocatoria y en la Selección de Honduras.
“Tratar de hacer las cosas bien, trabajar y esforzarme al máximo para poder seguir siendo tomado en cuenta, se viene un calendario bastante movido en la selección y me encantaría ser tomado en cuenta para ello”, expresó.