Cubierto con una bandera de Brasil y trasladado en un camión de bomberos, así fueron trasladados los restos del astro brasileño Edson Arantes do Nascimento, Pelé, cuyo cuerpo pasó por delante de la casa de su madre.
Celeste Arantes de cien años de edad aún no está consciente de la muerte de su hijo, por lo que el momento se convirtió en uno de los más emotivos durante el cortejo fúnebre.
Familiares y amigos de Pelé, fallecido el pasado jueves a los 82 años de edad, vieron frente a sus ojos el ataúd en el que fue trasladado O Rei desde el balcón de la residencia de la madre.
Entre los familiares de Pelé estuvo María Lucía Nascimento, quien lució visiblemente emocionada por el momento en el que estuvieron centenares de personas.
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Los vecinos de la ciudad de Santos ocuparon ambos lados del canal para rendir homenaje a su máximo ídolo y dar condolencias a la familia con cánticos del club por el que Pelé pasó a convertirse en leyenda.
"Pelé, Pelé, Pelé", "mil goles, mil goles", fueron los gritos que inundaron la ciudad, además de grandes banderas que ondeaban las personas en ambos lados de la calle.
Los familiares guardaron silencio desde el balcón, aunque en un momento se unieron a los cánticos de la emocionada afición de Santos.
"¡Viva o Rei!" gritaban unos desde la calle, mientras otros rezaban un Padre Nuestro, pese al calor sofocante.
El sepulcro de Pelé será en el Memorial Necrópolis Ecuménica, ahí se llevará a cabo en la más estricta intimidad.
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